11 de Abril de 2022 – El pasado sábado 9 de abril, el ‘Festival Comunitario Francisco el Hombre, Descubriendo Talentos’ fue el escenario propicio para demostrar que la integración, el respeto y la hermandad sí son posibles entre colombianos y venezolanos. Gracias al trabajo conjunto entre el Festival Francisco el Hombre y el ACNUR, a través de su campaña Somos Panas Colombia, más de 1000 personas se reunieron en Maicao para disfrutar de diferentes muestras culturales, emprendimientos y una amplia oferta de servicios. 

Este evento tuvo lugar en La Pista, un asentamiento humano ubicado en la antigua pista del aeropuerto de Maicao, el cual es considerado uno de los asentamientos humanos más grandes de La Guajira. La Pista se ha convertido en un lugar de acogida para cerca de 13.000 personas provenientes de Venezuela: refugiados, migrantes, población indígena Wayúu y colombianos retornados, además, de población desplazada y comunidad de acogida. A pesar de las múltiples necesidades que enfrentan, la comunidad trabaja día a día para reconstruir sus proyectos de vida, promoviendo espacios de articulación y trabajo en equipo, porque como ellos mismos lo dicen, en la unión está la fuerza.

Para Yuraima García, lideresa de la comunidad de La Pista, este festival comunitario fue un sueño hecho realidad: “Desde que ACNUR nos contó sobre la posibilidad de hacer este festival, esto se convirtió en un sueño para nosotros. Y ahora ese sueño se ha hecho realidad y ha sido todo un éxito. Estamos muy agradecidos y esperamos que así como hoy tuvimos este festival y esta unidad, que así sea siempre”, mencionó. 

 Alejandra Castellanos, jefe de oficina de ACNUR en Maicao, aseguró que para la organización “es fundamental promover estos espacios donde la cultura y las tradiciones se convierten en ejes fundamentales para la cohesión social y la coexistencia pacífica, poniendo en el centro a las comunidades y trabajando con ellas. El éxito de esta jornada fue gracias al compromiso de la comunidad, la Alcaldía y las organizaciones invitadas, así como al corazón y la entrega de cada uno de los participantes en tarima, colombianos y venezolanos, quienes nos recordaron que es más lo que nos une que lo que nos diferencia. Reafirmamos que la inclusión y la integración sí son posibles, que compartimos sueños y fortalezas, y que cuando colombianos y venezolanos nos unimos, podemos lograr grandes cosas”.

Un día de celebración con actividades en dos escenarios distintos que funcionaron de manera simultánea. En el primero, los visitantes pudieron recorrer los puestos de 39 emprendimientos de venezolanos y colombianos, y en el segundo disfrutaron de diferentes muestras artísticas como presentaciones de danza Wayúu, el semillero vallenato de la Casa de la Cultura de Maicao, danzas de los barrios Ovidio Mejía y San Agustín, además de otras muestras artísticas a cargo de jóvenes y adolescentes, la comunidad LGBTIQ+ y personas con discapacidad.  

La jornada finalizó con la presentación de Juancho Fuentes, ganador del Festival Francisco el Hombre 2020, y quien, a ritmo de vallenato, recordó que la música es un lenguaje universal: “Iniciativas como estas ayudan a que haya más solidaridad y nos olvidemos de las diferencias. Nosotros como anfitriones tenemos la responsabilidad de tenderles la mano, de dejar atrás las diferencias. Ellos están aquí para salir adelante y debemos ayudarlos. Somos muy privilegiados de poder compartir con nuestros hermanos venezolanos, hay mucho talento aquí”, afirmó el artista.

Carlos Ustarioa, líder del barrio Oviedo Mejía, indicó que “esta actividad nos hizo olvidarnos de los prejuicios que teníamos. Dimos pasos agigantados para conocernos mejor y construir confianza”. 

Con esta actividad ACNUR reafirmó su compromiso con la población refugiada y migrante, así como con la comunidad colombiana que los ha acogido, con el fin de seguir promoviendo espacios de inclusión e integración que permitan fortalecer los lazos comunitarios.